En la situación actual debida a la pandemia de COVID-19 se pone de manifiesto la importancia de los laboratorios de alta seguridad biológica para luchar contra las enfermedades de grave impacto sanitario y económico. En España, la mayor de estas instalaciones está en el CISA (INIA). Esta instalación está desarrollando un importante papel en la lucha frente a esta grave enfermedad.
En un mundo globalizado existen riesgos sanitarios inherentes a la alta movilidad de personas y mercancías, y que es necesario gestionar. Entre ellos está la emergencia periódica de nuevos patógenos que amenazan la salud humana y la sanidad animal, propagándose a gran velocidad. En este contexto es cada vez más necesario investigar sobre los nuevos patógenos emergentes que amenazan la salud y seguridad humana, el suministro de alimentos (seguridad alimentaria) de origen animal a la población, y la conservación del medio ambiente, y hacerlo de forma segura. Para ello existen laboratorios de alta seguridad biológica donde se pueden manejar virus y otros agentes infecciosos de enorme impacto económico y sanitario en condiciones seguras.
El Centro de Investigación en Sanidad Animal (CISA) es la mayor instalación de alta seguridad biológica existente en España y pertenece al Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA), un Organismo Público de Investigación del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades. Esta instalación, situada en Valdeolmos (Madrid) tiene cerca de 11.000 m2 de espacio de alta biocontención, distribuidos en laboratorios y animalarios que cuentan con todas las medidas de bioseguridad necesarias para manejar patógenos de clase 3 (OMS) y clase 4 (OIE) con total seguridad.
El Centro desarrolla proyectos de investigación y servicios a entidades tanto públicas como privadas, en el ámbito de las enfermedades infecciosas de grave impacto económico y sanitario, muchas de ellas zoonosis que afectan tanto a animales como a humanos. El personal científico y técnico que trabaja a diario en el CISA está entrenado y preparado para dar respuesta a crisis sanitarias como la actual pandemia de COVID-19. En el CISA hay grupos con gran experiencia y equipos necesarios para trabajar en diagnóstico virológico masivo, algo que se ha revelado de gran utilidad para controlar la transmisión del virus SARS-CoV-2 causante del COVID-19. En la actualidad se están analizando 300 muestras diarias por PCR para detección del genoma del SARS-CoV-2 en muestras de personal de riesgo (SAMUR-Protección civil, policía, bomberos…) en servicio en Madrid, uno de los “puntos calientes” de esta pandemia. Del mismo modo, los diferentes grupos de virólogos del CISA están contribuyendo a buscar soluciones terapéuticas (estudios de eficacia de antivirales) y diagnósticas (desarrollo e implementación de técnicas de detección del virus, su genoma, o anticuerpos específicos) que una vez comprobada su funcionalidad podrán ponerse en servicio para poder controlar la pandemia y mitigar sus efectos en la población. Además, el CISA cuenta con instalaciones y personal de animalario bajo condiciones de alta seguridad biológica que son esenciales para las pruebas de eficacia en modelos animales de las vacunas que se están desarrollando en España frente a esta infección. En la actualidad tres grupos de investigación del CSIC, que no cuenta con este tipo de instalaciones, comenzarán pronto a trabajar en proyectos dirigidos a desarrollar diferentes tipos de vacunas frente a COVID-19.
AUTOR: Miguel Ángel Jiménez Clavero es Investigador Científio en el CISA. Su trabajo consiste en dirigir proyectos de investigación dedicados al estudio de enfermedades emergentes de etiología vírica que afectan a los animales, incluyendo zoonosis de grave impacto sanitario en el ser humano.